Iglesia de la Encarnación
Yunquera (Málaga) , 5 agosto 2009
La sangre el desierto riega,
triste y frío. Su espesura
de abono feraz anega
con su luz la tierra oscura.
Oscura y seca. El vacío
del odio helado, del frío
se derrite en su calor.
Panal derramado, mana
el corazón miel humana:
dulce savia del amor.
La sangre el desierto riega,
triste y frío. Su espesura
de abono feraz anega
con su luz la tierra oscura.
Oscura y seca. El vacío
del odio helado, del frío
se derrite en su calor.
Panal derramado, mana
el corazón miel humana:
dulce savia del amor.
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