Sorprende este bullir de bichos:
lagartijas, hormigas, gusarapos
salen a la luz desde sus negros túneles
y se rozan con ásperos hierbajos.
Late el corazón: sangre y hormonas.
Pían su música monótona los pájaros.
Cuánto trapicheo de vida me respiro.
Pica el polen en los ojos y las manos.
Aunque la muerte es plácida penumbra
-invierno tranquilo y subterráneo-,
qué bien la vida, urticaria de abejas,
enjambre renacido, picotazos.
miércoles, 5 de julio de 2017
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